265. TEORÍA BÁSICA SOBRE EL CID
El Cantar de Mio Cid es considerado el primer texto fundamental de la literatura española. No
sabemos la fecha de su composición, ni siquiera su autor, pero ha llegado a nosotros en una
única copia realizada cerca el año 1200, por un monje que se identifica como Per Abbat
(el abad Pedro). El poema pudo ser compuesto con anterioridad por un juglar o varios y
transmitido de manera oral, aunque nada de esto puede probarse.
Se trata de un extenso poema narrativo (más de 3.000 versos) que cuenta las hazañas del caballero Rodrigo Díaz de Vivar, “el Cid”. Este personaje existió realmente y la mayor parte de los hechos del poema son reales, aunque otros se deben a la imaginación de su autor.
El argumento se basa en dos hechos que deshonran al Cid y su posterior reparación. Por
lo tanto, hay un doble ciclo de caída y recuperación que puede representarse por una “W”.
Momento alto: El Cid es un caballero de Sancho II
Motivo de caída: es acusado de traición (razón alternativa: obligó a jurar al rey Alfonso VI que no había matado a su hermano Sancho II)
Momento bajo: El Cid es desterrado
Motivo de ascenso: Conquista Valencia y manda regalos al rey.
Momento alto: El Cid es perdonado. Sus hijas se casan con los infantes de Carrión.
Motivo de caída: sus hijas son maltratadas por los Infantes de Carrión.
Momento Bajo: El Cid pide justicia al rey.
Motivo de ascenso: sus caballeros vencen en duelo a los infantes.
Momento Alto: El Cid casa a sus hijas con los herederos de Navarra y Aragón.
El argumento se puede resumir de la siguiente manera:
- Rodrigo Díaz de Vivar, un caballero respetado del rey Alfonso VI y antes de su hermano
Sancho II, es desterrado por causas poco claras (faltan las primeras páginas del manuscrito,
aunque hay dos posibilidades: por quedarse dinero de los impuestos o por obligar a jurar
a Alfonso que no había mandado matar a su hermano para acceder al trono). Sale de
Castilla acompañado por otros caballeros leales y se dedica a conquistar territorio musulmán.
El botín de las conquistas se lo manda al rey para conseguir su perdón. Tras conquistar
Valencia, el rey lo perdona e incluso le ofrece casar a sus hijas con nobles importantes (los
infantes de Carrión).
- Tras las bodas, los infantes quedan en ridículo al escaparse un león que el Cid guarda en
una jaula, ya que muestran su cobardía. Deciden vengarse llevando a sus esposas al
robledal de Corpes y dándoles una paliza. El Cid las encuentra y pide justicia el rey. Se produce
un “juicio de Dios” entre los infantes y caballeros del Cid, venciendo estos últimos. El rey
decreta el divorcio y las hijas se casan con los herederos de Navarra y Aragón.