203. TEXTO EXPOSITIVO BREVE SOBRE LAS ESTROFAS MÁS TÍPICAS EN EL RENACIMIENTO
Las estrofas más típicas del Renacimiento son las siguientes:
El soneto, con origen en Petrarca y sus seguidores, se compone de catorce versos endecasílabos (11 sílabas), agrupados en dos cuartetos y dos tercetos. La rima es consonante y su distribución más habitual es ABBA ABBA CDE CDE (aunque, a veces, los tercetos varían).
La lira, usada por primera vez en español por Garcilaso en su famosa Oda a la flor de Gnido, se compone de cinco versos heptasílabos (siete sílabas)y endecasílabos (7,11,7,7,11), con rima consonante distribuida así: a, B, a, b, B.
La octava real, también de origen italiano, se usa sobre todo en poemas épicos debido a su amplitud y sonoridad rotunda. Se compone de ocho versos endecasílabos, rima consonante y la siguiente distribución: ABABABCC. El pareado final otorga la sensación de cierre a la estrofa.
Por todo ello, podemos comprobar que el Renacimiento abandona en buena medida el verso octosílabo de la Edad Media, y aparca por completo el verso dodecasílabo (el arte mayor castellano). A su vez, adopta el gusto italiano por el endecasílabo, el cual se adapta con naturalidad al heptasílabo debido a la coincidencia de ambos en el acento de la sexta sílaba.